viernes, 22 de julio de 2011

Quise darte el viento

"El arte es una mentira que nos permite decir la verdad"

La busco detrás de la piel que viste mis dedos… esperanzaLos miro y sé que está ahí, latiendo débil,  aguardando. Sueño que brota en el papel, que de a poco, muy de a poco, se va deletreando con la inercia sutil que acompaña siempre al después. La busco lejos tuyo, aunque con ello se me vaya la vida, porque no puedo ir de tu mano esta vez. Porque si no me alejo de tu sed de fe a la que llamaste con mi nombre, no voy a poder hallarla jamás. Los invisibles lazos con los que me amaste hoy me desgarran, aunque permanezca inmóvil, fiel al deber de honrarlos como quien ha hecho un juramento ante  Dios. Sucede que de la inmensidad de tu querer, se desprendieron (o me cediste sin saberlo) tus duelos más oscuros. Y hoy es demasiada la soledad, demasiada la noche, tan poco el aire. Quise liberarte cuando pude, quise darte el viento para que no doliera soltarnos, y no te escondí bajo crisantemos, ni dejé piedras frente a las cuales echar raíces, porque supe que así sólo lograría perecer, ahogada bajo tu tierra,  atada de brazos a un adiós prematuro. Quise darte el viento para que te acunes en paz, porque solo con la llegada de tu remanso, iba a poder respirar. Y aunque el mundo tenga todo menos certezas, tanto amor a algún lugar debe transmigrar. Así es que yo sólo puedo desear que estés allí descansando, amnésico de heridas, al otro lado de la miel que besa mi ventana y envuelve mi ensueño con tu olor, y espero que esta sea la última vez que el día me encuentre ceñida a tus hermosas cadenas.