sábado, 27 de noviembre de 2010

Cada cual tiene sus estrellas

Cada cual tiene sus estrellas -comentó Klingsor, dejando caer las palabras-
Yo sólo creo en una cosa: el ocaso.
Viajamos en un carruaje sobre el abismo, y los caballos se han espantado.
Nos hallamos en el ocaso, todos.
Tenemos que morir, tenemos que nacer de nuevo.
Ha llegado el momento del gran viaje.

(Herman Hesse)